Anécdota: La pequeña pelea.

Anécdota. (Original)

Por: Eduardo Diego Ortega

La pequeña pelea.

Era un día como otros tantos, Brisa, Alexsandra, Mayra, José Mario, Ángel, Valerya y yo nos encontrábamos desayunando en el patio de la escuela. Todo iba normal hasta que los primeros 5 nombrados decidieron ir a jugar a “Tú la traes”; estaban jugando y Valerya y yo nos estábamos riendo de ellos. Ese preciso día, la maestra de Química había encargado presentar una bebida energética como último trabajo para cerrar el parcial. Valerya decidió juntar varios refrescos en un pomo para presentarlo como su bebida, me dio a probar y sabía rico… ¡Listo! Su trabajo estaba hecho para presentarlo la siguiente hora (terminando receso). Yo bien bobo decidí agitar el pomo, ahora que lo recuerdo no sé porque hice eso, toda la bebida del pomo comenzó a derramarse y saltaba tal cuál espuma. Me quede con el frasco en la mano, al darse cuenta de lo sucedido, Valerya comenzó a llorar y decir palabras que ni al caso… Brisa y Alex se acercaron a ver qué pasaba y me ayudaron a limpiar y volvimos a hacer la bebida. En este caso Valerya dijo:

-       “¿Soy yo o es él? Ustedes decidan”

A lo cual todos se pusieron de mi lado y desde ahí no hemos vuelto a saber de ella.

Anécdota. (Corregida)

Por: Eduardo Diego Ortega

La pequeña pelea.

Era un día como otros tantos, Brisa, Alexsandra, Mayra, José Mario, Ángel, Valeria y yo nos encontrábamos desayunando en el patio de la escuela. Todo iba normal hasta que los primeros 5 nombrados decidieron ir a jugar a “Tú la traes”; estaban jugando y Valeria y yo nos estábamos riendo de ellos. Ese preciso día, la maestra de Química había encargado presentar una bebida energética como último trabajo para cerrar el parcial. Valeria decidió juntar varios refrescos en un pomo para presentarlo como su bebida, me dio a probar y sabía rico… ¡Listo! Su trabajo estaba hecho para presentarlo la siguiente hora (terminando receso). Yo bien bobo decidí agitar el pomo, ahora que lo recuerdo no sé porque hice eso, toda la bebida del pomo comenzó a derramarse y saltaba tal cuál espuma. Me quede con el frasco en la mano, al darse cuenta de lo sucedido, Valeria comenzó a llorar y decir palabras que ni al caso… Brisa y Alex se acercaron a ver qué pasaba y me ayudaron a limpiar y volvimos a hacer la bebida. En este caso Valeria dijo:

-       “¿Soy yo o es él? Ustedes decidan”

A lo cual todos se pusieron de mi lado y desde ahí no hemos vuelto a saber de ella.